Trincheras dialécticas

16 octubre 2009

Editorial sobre la reciente polémica entre Constantino Berruga y Matilde Valentí­n

Recientemente, visitaba nuestra localidad la diputada regional Matilde Valentí­n para denunciar que el alcalde de La Roda, Vicente Aroca, sólo ha contratado a seis de 75 desempleados que podí­an salir del paro gracias al Plan de Choque de Castilla-La Mancha. Asegura Valentí­n que en nuestra localidad existen 75 credenciales expedidas y que el alcalde sólo ha suscrito seis por el momento. De manera casi simultánea, y como están acostumbrados desde el equipo de Gobierno, su portavoz, Constantino Berruga, aseguraba que en el Ayuntamiento hay contratados ya 23 trabajadores… o sólo, dependiendo del punto de vista. Y con los puntos de vista, por cierto, le gusta jugar al Partido Popular, al menos en nuestra localidad, porque de momento no procede abrir la mirilla al campo nacional; ya sabe, la cosecha no serí­a buena.

Constatino Berruga ha desmentido las declaraciones de Matilde Valentin, apoyado -cómo no- por los contertulios de cada viernes de uno de los medios que le sigue a pies juntillas, y ha asegurado que en los próximos meses se conseguirá sacar del paro a las 35 personas que faltan -que, según la dirigente socialista, podrí­an llegar a 69-. El caso es que, a pesar de las «mentiras» y de la «desinformación» que llega desde el PSOE de Castilla-La Mancha, el portavoz popular no ha tenido más remedio que reconocer que no se han cubierto las credenciales previstas de acuerdo con el Plan de Choque de Castilla-La Mancha; eso sí­, lo ha hecho a su manera, para que pasase desapercibido que, efectivamente, el Ayuntamiento ha podido sacar a más personas del paro y no lo ha hecho. Cierto es que no es lo mismo que se hayan formalizado seis contratos que 23 (y el PSOE deberí­a ser mucho más exacto en los datos), aunque la realidad es que todaví­a hay gente sin empleo en nuestra localidad que podí­a estar contratada. Eso es lo realmente grave. Hasta el 30 de noviembre, tiene de plazo el equipo de Gobierno para cubrir estas previsiones, sino quiere dar más explicaciones, que parece ser que es algo que se le da tan mal como las veces que se justifican.

Lo que ocurre con las ruedas de prensa en nuestro pueblo se convierte en una suerte de trincheras dialécticas, desde las cuales, cada polí­tico tira la piedra con un tirachinas que apunta a los ojos de su adversario y se esconde en su realidad paralela. Por un lado, Matilde Valentí­n tirando el bombazo desde Toledo y, por el otro, Constantino Berruga defendiendo su concejalí­a… o quizás su feudo. Valentí­n habla del Caso Gürtel y Berruga destapa «la polí­tica de enchufe» del que tan bien informada está la «desinformada» diputada regional. Es complicado conocer la telaraña de favoritismos que pudiera existir en nuestra Comunidad, pero lo que sí­ se ha convertido en un silencio a gritos en nuestro Ayuntamiento es la falta de contratos para los desempleados y su amplio abanico de cargos de confianza con los que ha cubierto la Casa Consistorial. Lo que para la Junta es una polí­tica de enchufe, para el equipo de Gobierno probablemente esté justificado como su particular Plan de Choque.

Está claro que nos encontramos ante una maldita contradicción que se convierte en polémica cada vez que un cargo socialista visita nuestra localidad. Quizás no ocurre lo mismo cuando vienen los diputados regionales del Partido Popular. En cualquier caso, desde estas dos trincheras tan bien financiadas, serí­a necesario plantearse hacia qué ojos se dirigen los tirachinas de los polí­ticos: hacia los de sus rivales o hacia los de sus protegidos, es decir, los ciudadanos.