Esta vez sí. Jornada redonda de marcadores ajustados y pingües beneficios. La Roda C.F. rompió en pedazos una mala racha que empezaba a preocupar seriamente y lo hizo frente a un rival histórico, otro, venido a menos, en un escenario donde no ha mucho tiempo se libraron otras batallas de más calado, con contendientes de rancio abolengo. El Lega se jugaba su futuro, el deportivo y el otro, ni más ni menos, y ha perdido el primer embate. Le quedan otros cuatro. Resultó insuficiente la experiencia de viejos lobos como Víctor, Rubén Navarro o Pedro Hernández, incapaces ellos y sus esforzados escuderos de asaltar la muralla rojilla, armada hasta los dientes delante de Bocanegra. Los rodenses habían sido mejores en el primer tiempo y consiguieron adelantarse con un gol de fútbol sala, qué digo sala, de fútbol de salón, con taconcito de Berni, servicio espléndido de Sergio Ortiz, ahí va la liebre don Alvaro, y remate de Megías para conseguir, seguramente, el gol más plácido de toda su carrera.
En el segundo tiempo, asedio pepinero y resistencia rodense, atrincherados atrás y sin mucha intención de intentar sorprender a una defensa rival, cada vez menos poblada. Un par de buenas intervenciones del portero y la contundencia de los dos centrales, luego tres con la entrada de Mikel Méndez, fueron suficientes para ir agotando los segundos a un reloj que galopaba en contra de los intereses blanquiazules, con segundero de plomo en la gobanilla de Antonio Cabezuelo. Victoria sufrida pero justa y objetivo prácticamente conseguido. Fuera fantasmas.
En el Carlos Belmonte, jornada matinal y fría, buena entrada y rival de poco cartel y candidez de sobra. Partido de los de agradecer a la clientela la asistencia y después regalarles un vídeo para que lo tiren a la basura. Tres puntos y muchas dudas, las mismas de la semana pasada y de la anterior a la anterior, aunque dicen los pragmáticos que importan mucho más los primeros que las segundas y que lo que vale es que con estos y los que vengan después vamos a tener suficientes para coronar el ansiado puerto de quedar entre los cuatro primeros. Ya quisieran en Oviedo, decían algunos. Pues sí, en eso llevan razón. ¿Pondrán los aprendices de Mareo mucho empeño en la batalla teniendo a los carbayones pendientes de un tropiezo ajeno?. Ea, ya nos salió la vena, malpensados que somos. ¿Acaso el FC Cartagena, hace dos años, iba a …?. Bueno, bueno, que nos estamos liando. Buena semana para todos.