- Nueva sección en Crónica de La Roda
No estoy de acuerdo con parte de un editorial y un artículo publicados por este periódico el pasado 26 de agosto. Puedo suscribir lo que se dice sobre la incompatibilidad de los cargos de senador y alcalde, los privilegios de los políticos, y existiendo la disciplina de voto no sé para qué queremos tantos diputados y senadores.
Reconozco mi amistad con Vicente Aroca, aunque no comparta las ideas políticas del partido en el que milita; y confieso también que le voté en las pasadas elecciones al Senado. Entiendo, ingenuamente, que quién mejor que alguien del pueblo para que nos represente en Madrid. Y digo que soy un ingenuo porque todos sabemos que los senadores y diputados votan al dictado del partido. También pienso que si alguna vez Vicente puede hacer algo por nuestro pueblo, lo hará; aunque lo veo difícil.
Creo en la honradez de Vicente Aroca, y no entiendo qué problema hay con que se haya comprado un apartamento en tiempos de crisis, yo también me he comprado un coche durante la recesión. Igual entre los dos reactivamos el consumo y la confianza en la economía española. Y estoy totalmente convencido de que lo ha hecho con dinero ganado de forma honesta.
No sé si Vicente aprobaría o no una oposición. Pero, ¿en qué consistiría esa oposición? La que yo aprobé en su día, hace ya más de veinte años, no suple, para nada, la experiencia en el puesto de trabajo que he adquirido durante todo este tiempo; y es más, hoy no pasaría una prueba que está bastante alejada de lo que es luego el trabajo diario. Y mi experiencia con las decenas de compañeros que he tenido me dice que el aprobar un examen no es síntoma de ser un buen trabajador ni una persona honrada ni un buen compañero.
El examen de un político son las elecciones, y las del Senado son, precisamente, las únicas con listas abiertas. ¿Seguiremos poniendo la X en el Senador D. Vicente Aroca?
Lo que sí podríamos exigirle a Vicente es que el dinero que está ganando como Senador lo invierta en el pueblo. Hace tiempo que no escucho nada del tan ansiado aeropuerto de mercancías, igual sería un buen negocio. Al estar nuestro pueblo situado entre los aeropuertos de Castellón y Ciudad Real, descongestionaría bastante la actividad de estos.