- El juzgado de lo mercantil número 2 de Madrid ha aceptado la solicitud al constatar su «estado de insolvencia». Debe más de 522 millones de euros
La autopista AP-36, que une Ocaña con La Roda como alternativa a la A-3, ha sido declarada formalmente en concurso de acreedores. El juzgado de lo mercantil número 2 de Madrid ha aceptado la solicitud de las sociedades gestoras de la infraestructura, presentada el 19 de octubre ante la «imposibilidad de afrontar los pagos de su deuda financiera», que supera los 522 millones de euros. El juzgado ha constatado el «estado de insolvencia» de la autopista y ha designado a dos administradores concursales: el abogado Vicente Flores y el Banco Sabadell, éste último como representante de los acreedores. Los bancos que invirtieron en la AP-36 y ahora no pueden cobrar su deuda son CaixaBank, BBVA, Caixa Banco de Investimento, Banco de Valencia, Royal Bank of Scotland (RBS), Banco Santander, Banco Sabadell, HSBC, Banco Caixa Geral, Banco CCM, Bank of Tokyo-Mitsubishi, Société Générale, Deutsche Bank, Natixis, Landesbank Hessen-Thurigen Girozentral y Unicaja Banc.
La autopista, en servicio desde 2004, supuso una inversión de unos 523 millones de euros, prácticamente la misma cifra que la deuda que tiene 8 años después. En lo que llevamos de año, el número de usuarios ha caído casi un 20% respecto al mismo período de 2011. El Ministerio de Fomento, además, está investigando “los sobrecostes desorbitantes” de las expropiaciones de terrenos durante la construcción de las autopistas, según anunció el secretario de Estado de Infraestructuras Rafael Catalá.