SE INTENSIFICA LA GUERRA ABIERTA ENTRE LOS AGENTES Y LOS GOBERNANTES

El equipo de Gobierno acusa a un policía local de falsificar un parte médico

  • En un escrito firmado por el jefe accidental del cuerpo y el concejal de Seguridad, acusan a este agente de cometer un "presunto delito de falsificación de justificante de asistencia médica" para no cubrir un servicio. Ocurrió después de que le denegaran un día de asuntos propios
28 febrero 2014

Vuelve a dispararse, otra vez, la tensión entre el equipo de Gobierno y gran parte de la plantilla de la Policía Local de La Roda. Ésta vez con motivo de un durísimo informe contra un agente firmado por el oficial jefe accidental del cuerpo -y persona de máxima confianza del Gobierno local- y el propio concejal de Seguridad Ciudadana, José María Alarcón. En el texto, que ha desvelado este viernes el diario La Tribuna de Albacete, se acusa a V.B.S. de cometer un presunto delito de «falsificación de justificante de asistencia médica», para no acudir a cubrir el operativo de seguridad preparado para la prueba del circuito provincial de bicicletas todoterreno (BTT), organizado por la Diputación, que se celebró el pasado 3 de febrero con la asistencia de 900 deportistas.

Las reiteradas bajas de los agentes -que en numerosas ocasiones han provocado graves deficiencias en el servicio- han sido motivo de disputa en los últimos meses entre el Ayuntamiento y el cuerpo policial. Desde la Policía Local se acusa al equipo de Gobierno de imponer «condiciones esclavistas» con «cuadrantes imposibles» y «organización pésima». Además, denuncian reiterados retrasos en los pagos de parte de la nómina (complementos y horas extras, sobre todo). El ejecutivo local, sin embargo, cree que estas bajas son una forma de presión inadmisible para mantener ciertos privilegios.

Había solicitado día de asuntos propios

Según el escrito de acusación del equipo de Gobierno contra el policía local, éste solicitó un día de asuntos propios que le fue denegado precisamente por la celebración de la Ruta BBT. Cuando llegó el 3 de febrero, el agente comunicó que se sentía indispuesto y no fue a trabajar. Dos días después presentó un justificante médico que al Ayuntamiento le pareció raro «por tener diferente formato al resto». El alcalde se entrevistó con el médico que supuestamente lo firmó y -siempre según esta versión, recogida en La Tribuna- el doctor negó haber realizado ese justificante.

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