Los pobres y la alegría

  • Reflexión sobre las derrotas de La Roda CF y el Albacete Balompié en sus respectivos encuentros
14 diciembre 2015

Pues sí, va a resultar que sí hay quinto malo. Ya se nos antojaba a nosotros muy difícil completar la serie. Las estadísticas se empeñaban en anunciar que encadenar cinco victorias seguidas solamente está al alcance de unos pocos elegidos. Una pena porque la dinámica era la idónea y el rival de los más asequibles a priori que, como ustedes saben, es una manera de decirles que no hay que fiarse absolutamente de nadie. Tanto es así que nada más empezar ya nos demostraron que no habían venido a pasearse y que eso de ser víctima propiciatoria de un rival enrachado, nada de nada. Primera llegada, primer gol.

Lo que ocurrió después tiene que ver con el vértigo y la velocidad. Subir tan deprisa y tan alto, si tenemos en cuenta que estábamos abajo del todo, ha debido alterar las células sensoriales del equilibrio, de manera que al mirar hacia abajo nos hemos mareado y casi nos caemos. Digo yo. Por encontrar una explicación, básicamente. Es que desde la lógica del fútbol no se la vemos. No atinamos a entender qué diablos ha pasado para que a algunos futbolistas se les haya olvidado de un día para otro y para que un equipo brillante en las últimas jornadas nos haya mostrado otra vez su versión más ramplona, lejos de la exquisitez y la efectividad de los últimos partidos.

Qué duda cabe, si el mejor escribano echa un borrón, cómo no se va a equivocar un alumno de primero de caligrafía. No pasa nada. No pasa nada si utilizamos el tipex adecuadamente y disimulamos la mancha. Volver por el buen camino es cuestión de creer que se puede y ponerse manos a la obra. El domingo que viene, sin ir más lejos.

Otra derrota del Alba

Lo del Albacete Balompié está empezando a preocuparnos. Su poca consistencia defensiva y su nula eficacia atacante lo están convirtiendo en un enemigo fácil por previsible. Se trata de que el rival presione la salida del balón y espere a que llegue el error antes o después. Se lo hacen todos, Girona, Mallorca, Leganés… Todos.

Hemos sido defensores, todavía lo somos pero con matices, de la propuesta del entrenador. El Alba ha jugado muy bien al fútbol, no tanto esta temporada como la anterior, pero ocurre que ya nos conocen sobradamente. Hemos dicho, porque así lo creemos, que los sistemas son negociables, deben serlo, y que cuando no se puede llegar por un camino, se busca otro que nos lleve al mismo sitio.

Ayer, como la semana pasada y la anterior, nuestro equipo fue inferior al rival; no se trata pues de querer justificar si hemos perdido porque no hemos metido el gol que merecíamos –Sampedro dixit-, porque resulta que ellos, léase Girona, Mallorca o ayer Valladolid, también merecieron alguno más de los conseguidos. Se trata de analizar con profundidad qué es lo que está pasando, por qué somos tan vulnerables atrás y tan poco efectivos –un gol en los últimos cuatro partidos- en ataque y aplicarse para encontrar el remedio. Va en el sueldo, Don Luis.